Dos mujeres tambien cumplen condena. Ellas duermen en una habitación sin puertas, ventana ni techo. Cuando llueve todo se inunda. Un solo guarda con una pistola es la seguridad del edificio de muros agrietados. Las celdas no cuentan con letrinas y los presos salen una vez al dia al patio. En los cuartos no hay camas, y los mas afortunados duermen en esteras.
La hermana Pilar les visita de vez al menos una vez por semana y les escucha. Les saca de la celda y les da un poco de aire. No les habla de Jesús, ni de Dios, ni de la salvacion, ni del infierno, ni de NOMATARAS o NOROBARAS. Simplemente trata de que les de el aire. Muchos quieren aprender a bordar y ellas les enseña. Lo que hacen luego lo venden, salvo algunos trabajos que se quedo la Hermana Pilar. En uno de ellos un preso habia bordado a un policia maltratando a un posible delincuente (no se quien es en este caso el delincuente), y el titulo que habia puesto es NO A LA TORTURA, pero el director de la carcel, Ruy, le habia sugerido que lo cambiara por NO HAY TORTURA.
Mientras me preparaba para el show, ellos asistian desde sus celdas, apiñados como abejas en el panal. Luego los soltaron y juntos pudimos reirnos un poco mas. Hasta el director Ruy asistio agradecido, lo mismo que el guarda que dejo, durante una hora de vigilar. Pero nadie se iba a escapar, pues era la unica oportunidad de disfrutar en aquellos muros con olor a orin.
Al terminar, hicieron algunas preguntas sobre mi viaje y sobre si ellos podrian aprender magia. Evidentemente su finalidad era eminentemente practica. Solo les interesaba un tipo de magia. Nada da cartas y cuerdas, solo escapismo.