Primero sentí un crack y luego el canto de grillos era más frecuente. Abrí el pedal en Gweru pero luego no lo pude colocar de nuevo. Tras más de 60 kms sin pedal derecho, llegué a KweKwe. Terry dijo que eso estaba chupado y que mañana me hacía un pedal de madera. En Africa cualquier cosa te puedes esperar. Pero era cierto. Con madera de Teka me construyó uno nuevo que guardo de recuerdo. Pues el viejo me lo soldó y pude continuar sin problemas.
Lo que no te arreglen en Africa te aseguro que no tiene solución.