Trabajar sobre Kova es algo especial para mí. Siento que le debo mucho, y aunque parezca solamente una bicicleta, para mí es algo más. Es ya parte de mi personalidad. Son muchas horas encima de ella.
Y tantas horas agarrado a ese manillar ha hecho que la gomaespuma inicial terminara por desgastarse. Ciclos Fran me ha enviado una nueva cinta de piel en la que mis manos seguro desarrollaran nuevos callos.