El viento que hacia aquella tarde no paraba de buscarme las cosquillas. Ese baobab me podia proteger. Primero montar la tienda, luego la ducha y por ultimo preparar la cena. Con una ensaladita estaba todo arreglado, pero no hay mas que ver el color del tomate para imaginarse lo nutritiva que seria la cena.
A la mañana siguiente hasta me encontre con ganas de preparar un fuego para hacer Malawa un sencillo plato que Gili el holandes me enseñó a preparar y cuyas instrucciones aparecen en la seccion Platos Locales