foto grupo

Algunos sueños caben en una hojita

(Barcelona). Como de costumbre llegué una hora antes a la sala donde iba a ofrecer la conferencia. Me acompañaban Cati y dos de sus encantadores sobrinos con los que desplegamos las sillas para las más de 60 personas que acudieron al evento. Fue concebido como algo para los empleados y familiares cercanos de Click-Clix, una de las empresas que más me ha apoyado en la Vuelta al Mundo, pero al final hicieron extensivo el acto a amigos. Terminaron alquilando una sala en la parte alta de Barcelona y, tras la charla, hasta hubo un pica pica riquísimo. El público no podía ser más diverso. Desde niños de 8 años hasta niños de 90, como Enrique, quien me comentó tras la charla que no había conocido en su vida un tipo con tanto coraje como yo. Y eso dicho por alguien que hace amnea y que tiene 90 primaveras es mucho decir.
Abrí la conferencia con un nuevo documental que resume el proyecto y en el que llevo trabajando a fondo varios días. Es una recopilación de imágenes del viaje con un guión en el que trato de desmontar ciertos mitos. Los nómadas no somos super héroes. Sobrevivir a la muerte, en mi caso, no es una habilidad de mi carácter sino una ayudita del destino. Mi valor proviene de la aceptación de mis propias carencias: no voy a vivir eternamente por lo que será mejor que me ponga manos a la obra, reajuste el compás, y me dedique a la ingente tarea de cumplir mis sueños.
Primero detectarlo. Muchos me lo preguntan, ¿Cómo saber cuál es tu sueño, aquél que ha de poner tu mundo patas arriba y distinguirlo de un mero deseo efímero? Doy varias claves en mi libro Una declaración de Intuiciones, pero baste decir parafraseando a mi amigo Herman Zapp cuando habla de Cande, su mujer, que uno se enamora de la mujer que se enamora, no de la que le cocina mejor o de la que baila bien. El sueño al que debes rendirte, aquél que debe ser el centro de tu vida, es el que te quita el sueño, el que acaba repitiéndose una y otra vez en tus ensoñaciones. Y para detectarlo hay que estar en silencio, atento y vigilante, y observar. Desconectar para conectar con tu interior. Algo bien difícil cuando debes mantener tu presencia en las redes sociales, haciendo un ruido que distrae tu atención de lo más importante: el silencio.

comiendo con sobrinoa
A punto de comer patatas alioli del Tomás, dicen que son buenísimas

Los sueños no gritan, susurran. Lo más hermoso sucede a media luz cuando la escena no está iluminada por potentes focos, sino que es más una luminiscencia que proviene del reflejo de la luna en el mar. A media luz, a media voz, así es como los sueños se abren paso. Primero es un rumor, luego, mucho después, será un estruendo que te hará bajarte del tren.

durante la charla
Comienzan las preguntas

En algunas ocasiones les pido a los asistentes que me regalen sus sueños. No deseo saber sus autores y si solo el contenido de los sueños de mi audiencia. Estos son algunos de los sueños de aquélla tarde en Barcelona. Gracias a todos por participar, por venir, por colaborar comprando mis libros y documentales, y por supuesto a Sergi y Cati por su continuado compromiso con mi proyecto. Gracias por su amistad.

asistiendo a la proyeccion
Sergi a la derecha, asistiendo a la proyección

Paz y Bien, el biciclown.

 

LOS SUEÑOS DE LA AUDIENCIA:

  • tener salud y ser feliz
  • ser feliz (visitar también Butan e Islandia)
  • aprobar informática
  • hacer un ironman
  • conocerme
  • la realización interior
  • llegar a ser yo mismo sin depender del mundo exterior
  • viajar por todo el mundo y conocer distintas culturas
  • encontrar mi misión en la vida y realizarla. Está a punto de aparecer (eres de gran inspiración)
  • tranquilidad
  • ser feliz siempre
  • lo que has hecho tu, pero en coche
  • tener un perro
  • ser ingeniero aeronáutico y dos hijos
  • salvar vidas de la forma más humana posible y no parar de tener sonrisas
  • descubrir cómo aliviar el sufrimiento de las personas
  • encontrar al hombre de mi vida (o de este momento)
  • mi familia (y la tengo) yupiiii
  • hacer y ser feliz
  • viajar con mi familia a países con cultura distinta a la nuestra
    comprender el sentido de la vida
  • viajar por el mundo (avión, tren, coche, andando…)
  • dedicarme a la música
  • reformar un pueblo fantasma
  • ver crecer a mis nietas
  • crear un entorno donde el amor, la compasión y la ética sean más fuertes que el dinero y la competitividad
  • trabajar con niños necesitados
  • repartir tranquilidad
  • vivir tranquila
  • tener un caballo
  • ser feliz
  • vivir en paz y con la conciencia tranquila
  • morir en paz
  • mi familia unida
  • lo vivo cada día
  • vivir de crear, amar y reír
  • seguir teniendo cada día un motivo para sonreír
  • aprender idiomas y vivir en USA
  • viajar
  • confiar en la humanidad (y después de escucharte se ha realizado)
  • viajar más
  • vivir sin dinero
  • terminar la vida con serenidad, salud y equilibrio
  • la necesaria perspectiva de nuestra vida material
  • encontrar un lugar
  • viajar, conocer, y compartir con los demás
  • vivir sin enfermedades
  • viajar

2 comentarios en “Algunos sueños caben en una hojita”

  1. Gracias a tí Álvaro por ser como eres y transmitirnos tus experiencias. Hemos podido constatar que tu charla ha calado hondo en muchos de nosotros, y que tu mensaje nos ha hecho reconsiderar algunos aspectos de nuestra vida, y a la vez, dirigir la mirada a nuestro interior. Ahora, deberíamos hacer los deberes y cumplir con los sueños escritos, pero esto ya no depende ni de tí ni de nosotros… Si desde ISC hemos podido ayudarte a transmitir esto, estamos más que orgullosos, gracias.

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