Seguro que estarían los chicos del Orfanato de la ciudad, y los del proyecto de chicos de la calle de Manu e Inés. Al final más de 450 personas trataban de ver al loco vestido de Masai que hace brotar leche de un guante y huevos de gallina de personas. Gracias a Médicos del Mundo de Karatu por la organización de este espectáculo y por la asistencia brindada para que fuera posible.
La risa no cura el Sida, no potabiliza el agua, pero nos hace más fácil la vida.
Al final del show, algunos de los blancos que asistieron se acercaron para decirme: ?LES ha gustado mucho, SE han reído un montón?.
Como me he encontrado más veces con esa reacción, pregunto: ¿por qué la gente conjuga su risa en tercera persona? ( yo tengo mi teoría).
preciosa foto…. me encantaría viajar a guinea bissau y aprender a bailar alli como ellos. Ahora estoy en Estella, navarra, aprendiendo danzas de alli, y estoy alucinando. me encantaría poder ir alli y aprender de primera mano. Un saludo Alvaro, Tamara (la payaseta de Estella)