Shakura en Japón

La reacción japonesa ante el Coronavirus

Más o menos la misma que tuvieron cuando ocurrió el Tsunami del 2011. しょうがない o Shogani que ante la imposibilidad de traducir por algo más concreto habría que definir como “qué se le va a hacer“ o “es lo que hay“.

Muchos le critican al caracter japonés una excesiva resignación. Falta de sangre para entendernos. Por las nuestras, latinas, corre a veces demasiada, aunque en un caso como el actual nunca será demasiada.

Bandera de Japón en un campo destrozado por el tsunami
Bandera de Japón en un campo destrozado por el tsunami

Durante los días que viví en un campo de refugiados en Japón para ofrecer alguno de mis espectáculos de clown, pude observar algo que me dejó atónito: la extraordinaria disciplina y capacidad de trabajar en pos del bien común de los moradores del campo. Por la mañana se reunían en las instalaciones exteriores para hacer gimnasia. Cada uno a su ritmo. No solo movían el cuerpo sino que movilizaban su sentido de pertenencia a un grupo. A continuación formaban filas ordenadas para recibir el desayuno, salvo los días que a ellos mismos les tocaba servir o preparar las viandas. Todo estaba organizado por equipos y turnos. No había discusiones y cuando llegaba una empresa para repartir ropa o algún pequeño electrodoméstico, nadie corría ni reclamaba.

En sus pequeños compartimentos de cartón que habían levantado en el gimnasio de la escuela que ahora era su casa-edificio, acumulaban las donaciones recibidas.

Asistentes al segundo espectáculo en Japón
Asistentes al segundo espectáculo en Japón

En Japón aprendí que la Shogani es la palabra que ellos usan para referirse a la resiliencia. No es resignación es aceptación positiva. Es saber que las condiciones han cambiado y buscar la mejor manera de adaptarse a ellas. Todo eso sin histerias ni heroicidades. Bajando la cabeza, remangándose la camisa e hincando las rodillas en el suelo. Lo que viví aquéllos días es algo digno de recordar ahora. No criticaban al vecino con la palabra sino con sus gestos.

Una forma de resolver situaciones que nunca antes hemos vivido es aprender de la experiencia de otros que ya lo han experimentado. Y de todas las situaciones que he vivido en mis viajes por el mundo solo recuerdo dos casos de una envergadura semejante a esta pandemia: el corralito de Argentina del 2001 y el Tsunami en Japón en el 2011. De ambos fui testigo directo.

Barco lanzado en la calle de un pueblo de Japón
Barco lanzado en la calle de un pueblo de Japón

Aunque quiero mucho a Argentina, tengo grandes amigos allí, pongo como ejemplo a Japón en este caso. Mis amigos argentinos lo entenderán. Ante una crisis que sacude los cimientos de las familias, Japón se unió en ese puntito rojo que aparece en su bandera. Lo tomaron como Punto de Encuentro para salir juntos de esa crisis.

Muchas cosas positivas va a dejar esta crisis:

  • los políticos han aplazado sus disputas personales
  • la gente conoce un poco más a su vecindario
  • apreciamos más la naturaleza que un centro comercial
  • el Planeta respira (han bajado los niveles de contaminación en las grandes ciudades)
  • la gente ha vuelto a leer y algunos a escribir un diario
  • somos capaces de agradecer a otros su esfuerzo (como al personal sanitario y a todos los que trabajan estos días)…
Shakura en Japón
Shakura en Japón

Mientras llega la primavirus o primavera sigamos aprendiendo lecciones de esta época cargada de ellas.

Paz y Bien, el biciclown.

13 comentarios en “La reacción japonesa ante el Coronavirus”

  1. Puede que en la curiosidad de conocer las diferencias de culturas, adoptar lo que nos pueda ayudar de esas diferencias y, no tener miedo al cambio, PUEDE que nos haga mejores seres humanos. Por ello pienso, tú experiencia de vida aporta mucho a ésta sociedad y hay que colaborar a que así sea.
    Tu redacción de ayer ha sido ampliamente difundida y, espero, mueva alguna conciencia. Mi comentario de ayer no se grabó y, ya empiezo a superarlo…
    Grandeee!!

  2. Muchas gracias Álvaro por tus artículos!!
    Otros puntos positivos que nos deja el coronavirus:
    – Conocerse más a ti mismo
    – Valorar las pequeñas cosas
    – Darnos cuenta de que somos privilegiados
    – Compartir más tiempo con la familia

    1. Esta situación sienta nuevas reglas. Pero si los actores del juego no cambiamos de comportamientos, el mundo seguirá siendo el de hoy. Aunque las circunstancias cambien no lo hacemos nosotros. Si fuera al revés, cambiar nosotros y que no cambie el mundo, eso sería mejor. gracias

  3. ¡Muy buen post!

    Todo esto nos está ayudando a valorar más lo que tenemos y a estrechar más las verdaderas amistades que tenemos.

    Esperemos que en 2021 podamos volver a nuestro amado Japón.

    Un saludo y buen fin de semana Álvaro 🙂

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Al publicar un comentario en esta web aceptas mi política de privacidad, donde puedes ejercer tus derechos.
Por defecto para publicar un comentario WordPress guarda tu nombre, email e IP.

Scroll al inicio

NOTICIAS FRESCAS

cada día en tu buzón de correo
Suscríbete para estar al día de Viajes, Conferencias y reflexiones 😍