Parecidos como lo tomates del supermercado
Uno de los mayores riesgos de viajar por períodos de tiempo largos (años, lustros y casi décadas de continuo nomadeo) es que todo acaba pareciéndose. Esa callecita empedrada con un bar en la esquina recuerda a otra callecita empedrada con un bar casi haciendo esquina. La globalización muestra su peor cara en esos negocios que como plagas, se instalan en cada rincón del mundo, ajenos a la cultura local e imponiendo una moda foránea y avasalladora. Así uno no sabe si está en Zacatecas o en San Cristobal de las Casas, en Cartagena de Indias o en Malibú. No es que uno pierda interés por los lugares sino que los lugares acaban perdiendo interés.