Ellos estan dispensados del pago de tasas por los productos que transporten de Kinshasa a Braza y viceversa. Los duenhos de las tiendas se aprovechan de la circunstancia para pasar su mercaderia. Los discapacitados se lo toman como un trabajo, como una forma de ganarse la vida y cruzan a diario varias veces de capital a capital para justificar asi el paso de mercancias que no pagan tasas. Ahi estan en la foto hablando tranquilamente, con sus sillas al lado, esperando llegar para volver sin tocar siquiera tierra.