Pero hacia semanas que la direccion estaba un poco dura. Vamos que le costaba decir que no. Al girar el manillar no iba con suavidad. Preferi no abrir la direccion y visitar la mejor tienda de bicis de Windhoek.
Tras contarle a Toki un poco mi proyecto, decidio ponerse manos a la obra y en media hora descubrio porque Kova estaba tan tozuda últimamente. Le faltaba tanta grasa a un rodamiento que hubo de cambiarlo.
Gracias Toki por tu ayuda en este proyecto, y suerte con tu nueva tienda.
Tiene que estar rico sobre todo donde estás eso mojadito con un pan de la curruca en coín malaga de escandalo. Te lo dice una Rondeña. Gracias por hacernos ver tu felicidad con tan poca cosa. Necesitamos muchas raciones de humildad para poder vvir feliz como tu. De nuevo gracia a tí y a Isabel Gemio que nos presento una mañana de sabado en mi cama.